tintica

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En el estado de salud de las cosas



A través del llanto pálido de un cigarro que reposa en diagonal, viajan los ciclos.
Uno tras otro, los días. Montaña consciente empezada, cumbres inmensas aún por descifrar.
            Gracias, compañeros de viaje. Irrepetibles, como cada mañana.
                                            Eres universo.

Rebuznan con mono las paredes y en la terraza se habla de arte. Del encuentro con la luna más llena que nunca esta noche. Y siento el olor del espacio, geranio, vuelvo a discernir, estoy vivo.
                         Placer, si sólo fuese ir a verte y rebosar.

Todo está quieto. Mula se escurre entre los sueños, entre parcelas de riego por goteo.